¿Qué crimen es peor, agresión financiera o verbal? "El dinero puede ser devuelto," dice el Talmud, "pero el dolor de las palabras es irreparable; el dinero es la propiedad de una persona, mientras que las palabras dañan a la persona misma."
Más allá del motivo, algunas personas son emocionalmente más vulnerables que otras. La Torá repite varias veces que debemos ser cuidadosos con nuestras palabras hacia una mujer viuda, un huérfano y un inmigrante. Se le advierte al hombre que hable con sensibilidad con su esposa. "Los portales de la plegaria se cierran a veces, pero nunca los de las lágrimas".
Ejemplos de agresión verbal son recordar un evento pasado desagradable a una persona, insultar, avergonzar públicamente, preguntar por el precio de algo que uno igual no quiere comprar.
"Es mejor tirarse a un horno ardiente antes que avergonzar públicamente a una persona", dice el Talmud. Si uno tiene un problema con otro, que lidie con él en privado. Ser abierto y buscar una solución sensata es el mejor camino. Cuando sea posible, simplemente hay que perdonar y seguir adelante con la vida.