La primer instrucción de todo el código de ley judía (Shulján Aruj) es "Sé fuerte como el león cuando te levantas a la mañana para servir a tu creador"
Cada noche, cuando te vas a dormir, el alma asciende al cielo para recargar energías. A la mañana, el despertarse significa que Di-s dio devolvió el alma dentro de tu cuerpo, dándote el regalo de la vida, lo que, a su vez, significa que hay una parte de este oscuro mundo que debes iluminar. Di-s confía en que realizarás tu tarea.
Por eso, la primer frase que uno dice a la mañana es: Agradezco a Ti, Rey vivo y eterno, porque me devolviste mi alma con gracia, grande es Tu confianza.
Este es el pensamiento que ronda por la cabeza al momento de levantarse y comenzar el día.