Entre la cabeza y el corazón hay un angosto pasaje llamado el cuello.
Esto es una ventaja para nosotros, de modo que cuando el corazón se precipita frenéticamente por sus deseos y sus miedos, la cabeza puede aún observar desde su posición privilegiada sobre los rápidos y dirigir al corazón devuelta a su curso.
También es una desventaja para nosotros, porque la cabeza debe hablar muy alto y claro para hacerse escuchar por el corazón que se encuentra tan lejos abajo.
Si hay una divergencia entre ellos;se produce lo que comunmente se conoce como:Un nudo en el cuello.