La perspectiva judía de la vida es que aún las funciones fisiológicas son herramientas para el servicio a Di-s. En general esto se expresa de acuerdo a la enseñanza de nuestros sabios de que "todas tus acciones sean en aras del cielo"., es decir, cuando uno come y bebe, lo hace para tener fuerzas para servir a Di-s, aún cuando uno descansa, lo hace para reponer fuerzas para el servicio a Di-s.
Decimos en el rezo, "ellas (las Mitzvot) son nuestra vida", es decir, son aquello con lo que vivimos y de donde derivamos vida.
Al respecto del dormir propiamente dicho, Maimónides escribe, entre sus consejos medicinales, que uno debe dormir ocho horas cada día para estar sano.
Al respecto de la preparación para el dormir, nuestros sabios establecieron que digamos el Shemá Israel antes de ir a dormir, junto con una serie de peticiones (impresas en los libros de rezo) para que el irse a dormir sea con paz y el despertarse sea con paz.