Nuestros sabios explican que durante el mes de Elul (en el que nos encontramos ahora) hay una revelación de divinidad similar a la que hay durante los días de Shabat y Festividades. Son días en que la misericordia Divina iluminan cada parte de nuestra vida, dándonos la preparación adecuada para las fiestas del próximo mes, Rosh HaShaná, Iom Kipur, Sucot, etc.
Ahora bien, si la energía del mes de Elul es la misma que la de un Shabat durante el año, ¿por qué no tenemos un mes entero de shabatot?, ¡deberíamos comportarnos según las reglas de Shabat durante los 29 días del mes de Elul!
Obviamente no es así y, para explicar la diferencia, el Alter Rebe, el fundador del Movimiento Jabad Lubavitch, dio un ejemplo:
Cuando el Rey está en el campo, con toda su comitiva, andando hacia la ciudad, todas las personas pueden acercarse a hacerle peticiones, y el Rey los recibe a todos con un semblante alegre. Sin embargo, cuando el Rey entra en la ciudad y llega a su palacio real, sólo aquellos privilegiados pueden entrar y dialogar con él.
Lo mismo ocurre durante el mes de Elul: "El Rey está en el campo", lo que quiere decir que hay una revelación similar a la de un Shabat y Iom Tov, pero como si fuese "en otro lugar" no en el palacio del Rey con todo su esplendor, o sea, es el mismo Rey, pero con ropas de fajina, por así decir.
De la misma manera, el acceso que se tiene al Rey mientras éste está "en el campo" no es el mismo que cuando se encuentra en su palacio...
Sin embargo, no alcanza con el hecho de que el Rey mismo se haga accesible para sus súbditos, sino que, como vimos en el ejemplo, las personas deben acercarse para hacer sus peticiones.
El sistema que Di-s estableció para el universo es que primero debe haber un despertar y una iniciativa de la persona hacia Di-s, para luego haber una respuesta Divina. De hecho esa es una de las ideas principales de Rosh HaShaná: al comienzo de la creación Di-s creó el universo entero por motus propio, sin que nadie le despertase "las ganas" de crearlo. Sin embargo, luego de haberlo hecho, El estableció que año tras año debamos, por así decir, renovar el contrato del mundo, por lo que Di-s está a la expectativa de si vamos a despertarnos y generar en El la voluntad de crear el mundo nuevamente o no (Di-s libre y guarde).
Durante el mes de Elul debemos saber que es el tiempo de despertarse y corregir todas nuestras acciones, palabras y pensamientos que ocurrieron a lo largo del año. Esa es la iniciativa que se espera de nosotros, para luego ser respondidos con un año de éxitos, tanto en lo material como en lo espiritual, con bendiciones de salud, hijos y sustento en abundancia.
Ktiva veJatima Tova, leShaná tová uMetuká,
Que sean inscriptos y sellados para bien, para un año dulce y bueno,