Hay una fuerza que llamamos electromagnetismo.
No puede ser captada por ninguno de los cinco sentidos, solo sabemos de ella por sus efectos y fenómenos relacionados. Efectivamente, no podemos explicarla ningún otro término.
Sin embargo está en todos lados, y derivamos gran luz y fuerza.
Se manifiesta en la atracción de un magneto, en la luz del sol, en las ondas que llevan nuestras redes de comunicación a través del aire y el espacio vacío, en el trabajo hecho por nuestras máquinas y en incontables otros fenómenos.
Y es una.
Porque su creador es Uno.