La sección de esta semana se llama Pinjas. Se trata del nombre de un nieto de Aharón, hijo de Elazar que, a pesar de tener semejante linaje no era un Cohen (Sacerdote). Cuando Di-s elije a Aharón como Cohen, lo santifica a él y a sus cuatro hijos, Nadav, Avihu, Elazar e Itamar y su futura descendencia a partir de ese momento. Pero Pinjas ya había nacido y no había sido santificado.

Al final de la parashá anterior, cuando Balak intenta destruir al pueblo judío a través de la maldición de Bilám, éste último le aconseja a Balak hacer pecar al pueblo judío haciendo promiscuas a sus mujeres (las de los pueblos de Moav y Midian) hacia el pueblo judío. De esta manera ellos se alejarían de su Di-s y así sería fácil derrotarlos en la guerra.

Es entonces que el líder de la tribu de Shimón, Zimrí, toma a la hija de Balak, rey de Moav, por esposa frente a todo el pueblo. La Halajá (ley judía) es que quien encuentra a otro manteniendo relaciones con una mujer de otro pueblo, si siente un celo muy profundo por Di-s, tiene permiso de matarlo. Ahora bien: Pinjas vio lo que Zimrí estaba haciendo con su esposa del pueblo de Moav, tomó una lanza y los mató a ambos. Por este acto de bravura, Di-s le da el regalo de ser Cohen y le promete que sus descendientes serán Sumos Sacerdotes.

Este año leemos esta sección en la semana en la cual acaecen el 12 y 13 de Tamuz. Se trata de los días en que fue liberado el Rebe anterior, Rabí Iosef Itzjak Schneerson, de bendita memoria, de la cárcel en la ex Unión Soviética. La única razón por la cual fue encarcelado fue su incesante esfuerzo para mantener vivo el judaísmo, que estaba prohibido por el comunismo, en los diferentes puntos del país. A través de enviar rabinos y maestros de niños, de fundar escuelas clandestinas para enseñar judaísmo, de construir baños rituales (Mikvaot) y satisfacer las necesidades de los judíos de todo el país, el Rebe anterior mantuvo encendido el fuego del judaísmo.

¿Cuál es la relación entre Pinjas y el Rebe anterior? Ambos sacrificaron sus vidas por el mismo ideal: el judaísmo tradicional de la Torá. Más allá del concepto mismo de asumir responsabilidades, se requiere también del sacrificio necesario para hacerlo. Es decir, ambos vieron que si no actuaban en ese determinado momento de sus vidas, corría peligro la continuidad del pueblo judío entero y decidieron actuar. Pero la acción venía acompañada por el total sacrificio personal. Y ambos lo pudieron hacer.

En otras palabras: por cada desafío en la vida de una persona hay dos etapas (en general): 1) darse cuenta de la necesidad de actuar y, 2) superar el intrínseco egoísmo racional que nos lleva a no querer sacrificar nuestras vidas por un ideal, sino que dicta, influenciado por muchos factores internos y externos, la necesidad de sobrevivir: si el ideal hará que dejes de existir, quizás no debas actuar, a pesar de haber visto la necesidad...

Tanto Pinjas como el Rebe anterior vieron la necesidad de actuar y dejaron todo de lado para sacrificarse por ese ideal. Un ideal que hasta el día de hoy necesita que cada uno de nosotros haga en su pequeño mundo, tanto internamente, para sí mismo, como externamente, para la familia y la comunidad, sacrificios que lleven a la continuidad del judaísmo.

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