Discurso: La alegría de Dios es su fuerza Uno de los fundamentos del servicio a Dios es que no lo hacemos por un beneficio propio (ni material ni espiritual) sino para generar alegría en Dios mismo. ¿En qué consiste esta alegría? Una explicación que da fuerzas y esperanza incluso a aquellos que cometieron pecados: el amor de Dios es incondicional y constante, incluso en los peores momentos de la persona.